
Siempre es un placer ayudar a una pareja a cumplir su sueño. Si este además se hace esperar y tenemos dificultades para conseguirlo doblemente satisfechos. Las dificultades siempre son salvables si nos empeñamos en llegar a buen puerto.
Muchas gracias Joana y Miquel por vuestra disposición y entrega con un proceso en el que, como sabéis, nos dejamos el corazón, la piel, las lágrimas y lo que haga falta. Muchas gracias por hacernos partícipes en esta experiencia y por vuestra compenetración con la gestante. Os lo merecéis, y los logros cuando vienen de un gran esfuerzo se disfrutan más.